El Ansia Del Deseo
Ante el ocaso de la penumbra
va el sueño que se aleja
tras un sendero sin retorno
se marcha el recuerdo, su huella deja.
Lúcida obviedad del entorno
no hay lágrima que quiebre certera
si un tibio beso perfuma
con su borde la sonrisa tenue.
En palacio de almíbar el deleite
en regocijo ni acalla, aunque mengua
persiguiendo el anhelo insomne
que el ansia del deseo, nunca cesa.
Angel Luis González